lunes

¡Tate!


«Convertida en empresa, la lengua, sin que nadie se diese cuenta, ocupó el lugar de los murmullos, de las llamadas, de los quejidos, sordos o enérgicos; principio ordenador.
La lengua estaba destinada a ser UNA ADMINISTRACIÓN en la que toda conciencia tendría que entrar».

[Traducción de José Luis Sánchez-Silva]