viernes

Poema

 
HOMO VIATOR

Feliz el que se adentra en un sendero
por sus pies nunca hollado
y no se siente solo ni en peligro 
aunque a solas camine.
El que anda en íntima conversación 
con las piedras, los árboles,
los cielos,
                   y confía, 
                                   simplemente 
confía en la Divina Providencia.

Pidamos una fe tan sólida 
para el resto del viaje.
No puede hacernos daño. Todo lo más
milagros.