TÚ Y YO Y EL MUNDO
No preguntes quién eres tú ni quién soy yo
ni el porqué de todo.
¡Que lo investiguen los catedráticos!
para eso cobran.
Pon la balanza en la mesa
y deja que la realidad se pese a sí misma.
Ponte el abrigo.
Apaga la luz del vestíbulo.
Cierra la puerta.
Deja que los muertos embalsamen a los muertos.
Ahora vamos andando por aquí.
La que lleva las botas de goma blancas
eres tú.
El que lleva las botas de goma negras
soy yo.
Y la lluvia que cae sobre los dos
es la lluvia.
[Traducción de Francisco J. Uriz]